sábado, 16 de abril de 2011


EL OLOR DE LOS LUGARES

Mi nariz es un detector de buenos momentos. Despues de mis oidos mi nariz es el sentido que mas me hace volar. No es un olor delicioso, es un olor llamativo y diferente.

Los sentidos se han desarrollado en los seres vivos como los instrumentos que les sirven para poder tener una INTERACCION con el resto del universo. Por herencia genética o por aprendizaje, Su funcion es recabar información sobre lo que nos puede dañar.

El desarrollo de los sentidos en la evolucion ha estado íntimamente relacionado con las condiciones físicas y químicas del ambiente que nos ha rodeado en el transcurso de los tiempos. De hecho, los sentidos son una consecuencia de la adaptación al medio para evitar peligros

El olfato es el mas primitivo de los sentidos y el mas fuerte al nacer. Somos muy sensibles a una cantidad extraordinariamente grande de olores. Podemos distinguir hasta 10.000 olores diferentes gracias a los 20 o 30 millones de células olfativas que tenemos. Es imposible negarse a oler. El olfato es el único de los sentidos que es imposible cerrar a voluntad. Está tan ligado a la respiración que no podemos dejar de oler por mucho tiempo. Sin embargo, es también el único que se satura, a los pocos minutos de sentir un aroma ya no lo percibimos más.

Asimismo, es el único que no tiene que recorrer un camino hasta llegar al cerebro ya que está en contacto directo con las neuronas. En fracciones de segundos, se crea un proceso de conexión con las EMOCIONES. La información llega primero a zonas de cerebro muy antiguas responsables de las EMOCIONES, SENTIMIENTOS, INSTINTOS e IMPULSOS, donde se almacena la MEMORIA y se regulan la liberación de hormonas. Por este motivo, los olores pueden modificar directamente nuestro COMPORTAMIENTO. A medida que ejercitamos el olfato, conseguimos un placer mayor y al recuperar nuestros sentidos también ampliamos el CONOCIMIENTO.

Para los hombres que vivían en contacto con la naturaleza, el olfato era una útil herramienta de subsistencia. Podían identificar el estado de los alimentos y el peligro de los animales salvajes, el fuego de un incendio o la proximidad de una tormenta.

Pero la evolucion sigue su curso y nuestro nuevo habitat, que pongo en duda que ya no sea tan hostil que el de antes, ha pasado a ser de cemento y asfalto. El olfato no es indispensable para defendernos de animales y tormentas pero actua sobre nosotros de una manera inconsciente. Nos acostumbramos a las ciudades en las que vivimos, los humos de los coches, el calor del suelo en verano, los mercados llenos de comida…cada ciudad tiene su olor. De hecho, las ciudades son un olor. Una ciudad sin olor no cuenta a la hora de los recuerdos.

Cada ciudad tiene un olor particular como lo tiene cada casa y cada persona. El olor de Bilbao durante muchos años de RIA, olor a SIDERURGIA, ASTILLEROS Y DESECHOS. Fue vertedero de todos los residuos de quien la acompañaba hasta su desembocadura al mar, la INDUSTRIA. La misma a la que hoy en dia debe su vida y riqueza. Pero gracias a la REGENERACION de la Ria, si tuviera que decir a qué huele hoy BILBAO, diría que al primer golpe de nariz huele a LLUVIA!!!

¡Del olfato nace el amor! Y amor es lo que siento por Bilbao. Os dejo fotos de EL ANTES Y EL DESPUES DE BILBAO, del olor a RIA y olor a LLUVIA despues de su REGENERACION. Ademas, comparto con vosotros un texto y un video que mediante la PALABRA,la IMAGEN y el SONIDO intenta transmitir EL OLOR DE BILBAO.

Aunque por supuesto, sin su OLOR las imágenes simplemente de desvaneceran de nuestras retinas y no encontraran lugar en nuestros recuerdos.

Hoy en dia el olfato se ha OLOR a un segundo lugar, ha dejado de ser una herramienta indispensable para nuestra supervivencia. Aun asi, ha mantenido lo que para mi son un parte indispensable de la vida: los SENTIMIENTOS y los RECUERDOS. Gracias al olfato ampliamos nuestro conocimiento, conseguimos superar etapas y avanzamos en la vida. De esta manera, mediante el recuerdo del pasado construimos un presente que nos ayudara a encontrar un futuro.

Os invito a oler vuestra ciudad y compartir recuerdos y sentimientos.


viernes, 15 de abril de 2011

LA MAQUINA DEL TIEMPO



Quiero compartir con vosotros la maquina del tiempo que he descubierto. Una maquina que crea un tiempo de reflexión, meditación e incluso de desconexión.

Sin yo buscarlo me encuentro en un lugar diferente. Un lugar en el que nunca antes había estado…Se ha abierto una puerta a un lugar inesperado. Se ha abierto la puerta para que entre y sin dudarlo he cruzado a otra realidad. Parece que mas gente como yo ha sido invitada. Espero paciente en uno de los largos bancos que me invitan asentarme, rodeada de gente pero que a la vez no parecen ver al resto de personas. Llega mi turno, me informan de que ha llegado el momento de entrar.

El lugar es acogedor, un asiento rojo junto a la ventana invita a sentarme. Me siento. Dejo mis cosas entre las piernas. El resto de las personas entra conmigo y cada no encuentra su espacio. Alguna se queda en pie. Todas ellas miran al infinito, a un lugar sin fin, a otra dimensión. Ojos tristes, rostros apagados, miradas absortas…acaso no tienen motivos para sonreír? Observo a cada uno de ellos. Todos diferentes y cada uno una historia y aun así nadie dice nada. Observo sus miradas, intento entender su penuria, el porque de ese silencio, la raiz de esa tristeza… pero no hayo respuesta. Desisto, mi mirada se centra en la ventana. En el exterior la vida se sient, se palpa. Adentro silencio, tristeza y meditación. Afuera ruido, vida, movimiento. Prefiero seguir mirando por la ventana hasta que llegue mi turno. Por fin, alguien me llama.

Salgo y dejo a toda esa gente sumergida en su estado de trance. Yo he llegado a mi destino, esta es mi parada. Mañana volvere a coger el metro. Esta vez sonreire, tal vez alguien se contagie.